Se ponen en una olla dos litros de agua y se añade 1/4 kilo de garbanzos en remojo desde la noche anterior. Se agrega 500 grs. de morcillo, 100 grs. de jamón, un cuarto de gallina, 150 grs. de tocino, un hueso, un puerro y una zanahoria.
Se pone todo a hervir y se espuma muy bien. Se deja cocer a fuego lento unas dos horas aproximadamente y cuando los garbanzos estén tiernos se añaden cuatro patatas peladas y en trozos.
Aparte se cocerá un repollo picado con longaniza y se rehogará con aceite y un ajo picado.
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Realmente todos los cocidos se parecen, independientemente de la región donde se prepare. Por mi parte, el cocido andaluz no se le queda atrás al madrileño y los ingredientes vienen a ser los mismo. De todas formas, los dos son comidas potentes para ponerse las botas en la comida del mediodía.