Un diamante puede ser tan provocativo que los ladrones harían cualquier cosa para obtenerlo, hasta tragárselos. En una exposición de Joyas llevada a cabo en Sri Lanka, un hombre se traga diamante para intentar robarlo. Además del suceso veamos los peligros de tal acción.
Robo de diamante que acabó en el hospital
Todo sucedió en las instalaciones de la feria anual de joyas llevada a cabo en Colombo, capital de Sri Lanka. Un hombre de nacionalidad china le pidió a uno de los expositores (Belgrade International) uno de los diamantes expuestos para examinarlo. Con la ayuda de un cómplice (también de nacionalidad china) que buscaba distraer al dueño del diamante, el primer hombre se metió el diamante a la boca en un intento por reemplazarlo con uno falso. Sin embargo el dueño pudo percatarse del hecho dando aviso inmediato y pudiendo capturar al aspirante a ladrón. Este fue llevado a un hospital para recibir laxantes y así expulsar de forma natural al diamante. Sin embargo una radiografía reveló que el diamante estaba clavado en el esófago, por lo que sería sometido a una operación.
Peligros de tragarse un diamante
Los peligros de tragarse un diamante o alguna piedra preciosa que se encuentre en perfectas condiciones de corte es que puede cortar las paredes de cualquier parte del sistema digestivo. Un corte interno puede causar hemorragias de distintas magnitudes, provocando en el peor de los casos una septicemia al producirse el corte en el intestino grueso.
El diamante que se tragó este hombre chino está valorizado en cerca de 11.000 €. Después de la operación se comprobará si lo que se tragó era el diamante verdadero o el falso con el que pretendía cometer su robo.
Foto: Reuters
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