Londres es una ciudad perfectamente comunicada con el resto del mundo a través de sus cinco aeropuertos de que dispone en sus cercanías, y todos perfectamente comunicados con la ciudad con el fin de facilitar la ida y llegada de turistas y viajeros de cualquier lugar, que se acercan a conocer por unos días en una escapada de fin de semana o en unas vacaciones de verano todas las excelencias que Londres ofrece al forastero.
Los aeropuertos de que dispone Londres son los siguientes: Heathrow, Gatwick, Stansted y City. Sin embargo, hoy únicamente vamos a hablar del aeropuerto londinense de Heathrow, situado a 24 kilómetros al oeste de Londres.
El aeropuerto de Heathrow se ha convertido en el más transitado del mundo en cuanto a pasajeros internacionales. Se trata de un aeropuerto muy sofisticado y moderno. En estos momentos, cuenta con cinco terminales, aunque una de ellas no está aún terminada de construir. Los servicios que ofrece a sus visitantes son bastante completos y propios de un gran aeropuerto internacional, tal sería el caso de tiendas, zona de conexiones a internet, oficinas para cambio de monedas en todas las terminales, etc.
Si en nuestra escapada a Londres llegamos al aeropuerto de Heathrow, quizá la mejor manera y la más rápida de desplazarnos hasta la ciudad sea utilizando el tren, con el que estaremos en Londres en unos veinte minutos. Tendremos la opción de utilizar cualquiera de las dos estaciones que existen en el aeropuerto, aunque realmente están delimitadas, una para las terminales 1, 2 y 3 y la otra para la 4, que se encuentra un poco más retirada.
Pero si preferimos desplazarnos hasta Londres en autobús, desde este aeropuerto también salen autobuses con quinientos destinos diferentes, por lo que únicamente deberemos elegir el que más nos convenga en esos momentos. En general, casi todos los autobuses salen de las terminales 1, 2 y 3, y solamente algunos lo hacen desde la terminal 4.
Otra opción, y quizá la más barata, para desplazarnos hasta la ciudad en nuestra escapada a Londres es utilizar el metro, y concretamente la línea de Piccadilly. El único inconveniente que hay es que en el trayecto tardaremos unos cincuenta minutos.
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